Tipo de recubrimiento con textura abultada y rugosa que se asemeja a la lana de borrego. Es común en las fachadas de casas norestenses en las cabeceras municipales de Nuevo León y Tamaulipas.
El acabado aborregado en las paredes es una manifestación del deseo de protección contra el clima, pues ‘quiebra los rayos solares disminuyendo la temperatura interior, incorpora juegos de luz y sombra en los paños donde se incluye’.
Equipo Vernáculo, “Techos”, Blog “Arquitectura Vernácula en Bustamante”, 12 de octubre, 2012.
Corresponsal: Patricia Guerrero